Ayer unos cuantos fuimos a la fiesta de la nueva revista Perdiz. Decimos nueva y decimos bien, porque van por el número 2, no digáis que no avisamos rápido.
Nos encanta la definición que la revista hace de ella misma:
“PERDIZ es una revista sobre personas y las cosas que les hacen felices. Una recopilación de historias increíbles sobre gente normal. Un manual de supervivencia sin fórmulas mágicas. Es una colección de cosas bonitas. [...] Y es también un virus que, como pasa con los bostezos en el metro y las risas entre amigos, se pega. La felicidad es contagiosa.”
¡OLE! La felicidad es contagiosa, claro que sí. Nosotros proponemos: compremos la revista para tomar ideas de cómo ser felices, de cómo otros lo son, igual nos inspiramos un poquito. Intentemos que la felicidad se expanda, que fluya, que se pegue a más no poder. Empecemos por contagiárselo a la familia, a los amigos, a los compañeros de trabajo (incluso a los que no se lo merecen) …. Y a ver qué pasa, mal no nos puede ir.
Os pondríamos fotos del evento en Studiostore que fue muy divertido y muy moderno a partes desiguales. Pero ¿sabéis qué pasó? Que cometieron el error de montar un chiringuito de Morro fi. A las ocho de la tarde. ¡UN PECADO!
Y bueno… que perdimos el oremus. Ni caso a los patinadores bailarines, ni a la que hacía la manicura, ni a los caramelos de Papabubble que mira que son increíbles… Y por supuesto ni Instagram, ni tomar notas, ni nada de nada. Eso sí, después del tercer vermut unas risas que pa qué con los vídeos proyectados en bucle. Tenemos la teoría de que la culpa de todo es de las aceitunas.
En fin, qué esperabais…. este blog se llama (Dis)Order :)
Esperad, esperad, que hemos encontrado algo en Twitter. A ver si así nos hacemos todos un poquito la idea de cómo fue.
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